Honduras/ Entrevista a Héctor Bernardo, periodista especializado en América Latina

A 12 años del golpe contra Manuel Zelaya, asumió Xiomara Castro en Honduras. Con la presencia de 40 líderes mundiales, entre ellos las vicepresidentas de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, y de Estados Unidos, Kamala Harris, Castro se convierte en la primera mujer en asumir la presidencia hondureña. La flamante primera mandataria se define como “feminista, antipatriarcal, revolucionaria e incluyente”.

Para abordar la figura de Manuel Zelaya, Xiomara Castro y la realidad social y política de Honduras en los últimos años, radio Universidad de La Plata entrevistó a Héctor Bernardo, periodista, escritor, profesor y director del Observatorio Latinoamericano de Comunicación y Procesos Políticos (FPyCS de la UNLP). «Simbólicamente es un hecho trascendente. El golpe a Manuel Zelaya, en 2009, fue el comienzo de una serie de golpes, intentos desestabilizadores y de recomposición de  los Estados Unidos y de la derecha regional en América Latina y el Caribe, que planteaba una supuesta normalidad, que era una vuelta a los gobiernos neoliberales (Ecuador, Paraguay, Brasil, Bolivia), la persecución a través de Lawfare – a Rafael Correa, a Lula Da Sila, a Cristina Fernández de Kirchner  -, el engaño y la traición que fue el triunfo en Ecuador de Lenin Moreno. El triunfo en México de López Obrador, de Alberto Fernández en Argentina, el de Luis Arce en Bolivia, el de Boric en Chile, el de Castillo en Perú y el de Xiomara Castro en Honduras, muestran que ese discurso del fin del ciclo progresista, era solo propaganda de los sectores de la derecha para tratar de instalar una idea en la sociedad, cuando se ve que lo más está cuestionado es el modelo neoliberal, mientras que los modelos que proponen un mundo para todos y todas, son los que se consolidan», expresó.

Asimismo, Bernardo destacó que «hay que tener bien el claro algo que la propia Cristina ha señalado en muchas ocasiones, y que lo han hecho otros dirigentes, como Rafael Correa: esto triunfos son sobre el poder político, a veces solo de una parte, el ejecutivo, y a veces no llegan a poder conducir el legislativo y ese poder sigue en disputa. Pero está el poder económico, el de los medios hegemónicos, que sigue en manos de los sectores reaccionarios. Está el poder militar. En Hondura el ejército es entrenado, formado ideológicamente y financiado por Estados Unidos. Cuando tiene que responder, no lo hace al pueblo hondureño, responder a EE.UU», y agregó que «la injerencia también en poder judicial, que señalaba Cristina en su discurso, con la formación como antes era la de los militares en la Escuela de las Américas, en Panamá, que después daban los golpes y torturaban y desaparecían a su propio pueblo y a sus líderes. Hoy el poder se ha concentrado, por un lado en los medios hegemónicos de comunicación, para construir un discurso que justifique la persecución judicial. El Juez Moro se formó en el aparato de justicia de los EE.UU, donde tiene su centro todo ese armado de poder, que representa los intereses de los grandes conglomerados económicos, que tienen sede en Estados Unidos, que ha tenido una participación clave en todas las persecuciones y con una injerencia, a la que hay que prestarle atención, que es a través de las fundaciones y ONG’s».

La entrevista: