SE REALIZÓ EL RECAMBIO DE AUTORIDADES EN LA CÁMARA DE DIPUTADOS

La sesión preparatoria de la Cámara de Diputados en la que juraron los 127 legisladores que resultaron electos el 14 de noviembre último se inició a las 12.30, en el marco de un plenario en el que también se definieron las autoridades del cuerpo para el nuevo período parlamentario.

Con la jura de estos legisladores, se dio forma a una nueva composición parlamentaria para el segundo tramo de la gestión de Alberto Fernández, en la que el oficialismo es la primera minoría en ambas Cámaras. La nueva conformación de la Cámara baja muestra una fuerte paridad entre el Frente de Todos, que tiene 118 bancas, y Juntos por el Cambio, que cuenta con 115 escaños.

La sesión fue abierta por el diputado de mayor edad Daniel Ferreira pero luego se eligió como presidente provisional a Sergio Massa, quien tomó juramento a los 127 legisladores electos el 14 de noviembre.

Los primeros legisladores en jurar fueron el radical Facundo Manes, la dirigente de la Coalición Cívica (CC), María Borrego, y el macrista Hernán Lombardi, quienes lo hicieron con la fórmula por «la Patria y la Constitución».

También lo hicieron los legisladores de izquierda Nicolás del Caño y Romina del Pla, y el oficialista y sindicalista Hugo Yasky, quienes lo hicieron por la Constitución Nacional.

Al prestar su juramento, Del Caño pidió «echar al Fondo Monetario Internacional» mientras que Del Pla lo realizó también contra el pacto con el FMI, mientras que Yasky juró «por los 30 mil desaparecidos y por la Patria».

En el primer tramo también juraron los bonaerenses oficialistas Leopoldo Moreau, Sergio Palazzo, Victoria Tolosa Paz, y los opositores Daniel Santilli, Graciela Ocaña, y el legislador de Identidad Bonaerense, Florencio Randazzo.

También lo hicieron los diputados del Frente de Todos Daniel Gollan, Marcela Passo, Agustina Propato, Vanesa Siley, Constanza Alonso, Julio Pereyra, Mónica Litza, Daniel Arroyo, Brenda Vargas Matyi, Rogelio Iparraguirre y Mónica Macha.

También juraron los diputados electos de Juntos por el Cambio Marcela Campagnoli, Juan Manuel López, Danya Tavela, Gerardo Milman, María Sotolono, Emilio Monzó, Gabriela Besana, Margarita Stolbizer, Alejandro Finocchiaro y Fabio Quetglas.

SE DIVIDÓ EL BLOQUE RADICAL

Los sectores que disputan el liderazgo del bloque de la Unión Cívica Radical en la Cámara de Diputados no lograron superar sus diferencias respecto de la conducción de Mario Negri. Evolución Radical, el sector que conduce Martín Lousteau, decidió separarse de la estructura y conformó un nuevo bloque de 12 miembros liderado por Rodrigo de Loredo. La decisión no hizo más que aumentar la tensión al interior de Juntos por el Cambio, cuyo interbloque en la Cámara baja queda conformada por siete bloques.

En ese marco, la diputada nacional y vicepresidenta de la bancada de la Unión Cívica Radical (UCR) en la Cámara baja, Karina Banfi, pidió «desdramatizar» las consideraciones la ruptura de ese bloque, y estimó que más allá de esta división «se puede convivir en sintonía» y «sin ningún problema.

«Hay que desdramatizar un poco lo que significa el retiro de  Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti que en varias oportunidades armaron sus propios bloques y después pudimos convivir en sintonía», señaló Banfi.

Agregó que «las convivencias de los colectivos siempre son complejas y Martín Lousteau siempre buscó tener un bloque separado».

La diputada puntualizó que los legisladores que pertenecen a Evolución Radical en la Cámara baja son un grupo «un grupo de 10 o 12 diputados» frente a los 33 que integran el bloque que lidera Mario Negri, que «tiene representación de todo el país con una nueva generación de dirigentes».

Por su parte, el diputado nacional electo Martín Tetaz calificó como «un papelón» el tono que tuvo la reunión que mantuvieron el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y el senador nacional Martín Lousteau, quienes rivalizan por encabezar el Comité Nacional de la Unión Cívica Radical, y consideró que la fuerza política atraviesa «un proceso de renovación y que no se debe dramatizar tanto».

«La reunión de Morales con Lousteau es un papelón, como lo es cualquier escena que se lleve a cabo en público. Hay una renovación del radicalismo que está empujando un cambio y hay un espacio más tradicional del radicalismo que se resiste a este cambio, no hay que dramatizar tanto», expresó el legislador.

El lunes Morales y Lousteau se reunieron en el Comité Nacional de la UCR para zanjar las diferencias que existen entre los espacios que encabezan y evitar la conformación de otro bloque radical en la Cámara baja, separado de la bancada que encabeza el cordobés Mario Negri.

Martín Lousteau afirmó que «las transformaciones dentro de los partidos se producen no tan amigablemente como uno quisiera. No es lo mismo Cambiemos del 2015 que el JxC de 2019. Hace cuatro años eran solo tres partidos y el radicalismo iba solo en el asiento del acompañante. Hoy la coalición se amplió y hay otros partidos que quieren sus bloques».

Además, dijo que el radicalismo «está bastante más fuerte» y «tienen un montón de candidatos electoralmente competitivos en relación al 2015».

A su turno, la diputada Carla Carrizo manifestó que con la conformación de un nuevo bloque de legisladores de ese partido, se pretende evitar «el monopolio de las vocerías políticas» en el cuerpo.

«No puede ser la política del capricho el mensaje del radicalismo. No se puede penalizar al que gana y premiar al que pierde, es contraintuitivo», señaló Carrizo, haciendo referencia al jefe del bloque de JxC y del interbloque del radicalismo Mario Negri.

Finalmente, el presidente de la Convención Nacional de la UCR, Jorge Sappia, dijo que la ruptura se debe a «la falta de un debate previo» y aseveró que desde el sector partidario que encabeza no tienen «ninguna coincidencia con quien dirige el comité nacional» actualmente, en referencia a Alfredo Cornejo, a pocos días del 17 de diciembre, día en que se producirá la renovación de autoridades del partido.

«Nosotros no tenemos ninguna coincidencia con quien dirige el Comité Nacional», dijo Sappia e indicó que «la UCR no podía, y no debía haber formado parte de la coalición Cambiemos y luego de Juntos por el Cambio, sobre todo por la ausencia de un debate previo».

«No hubo ningún acuerdo programático», indicó el dirigente. Lo que se hizo «fue un acuerdo de posibilidades políticas que derivó en estas cuestiones», finalizó.