Tensión en Ucrania / Entrevista a Jorge Kreyness, analista de política internacional

Mientras Estados Unidos y la OTAN se preparan para rechazar las demandas que Rusia presentó para bajar la tensión en Ucrania, el Kremlin acusó a occidente de aumentar la presión político-militar en contra de Moscú y adelantó que no se quedará de «brazos cruzados» ante esas acciones. Radio Universidad de La Plara dialogó con el analista de política internacional, Jorge Kreyness para entender el conflicto en la frontera con Rusia.

«Ucrania fue una de las repúblicas que pertenecieron a las Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, y después de la caída de la URSS, se independizó. Tuvo un gobierno que mantuvo buenas relaciones y se integró al resto de los países de Europa Oriental, hasta que se produjo un golpe de estado pro-fascista, las llamadas revoluciones de colores – se lo conoce como el Maidán -, y a partir de ahí el gobierno ucraniano empezó a reivindicar al viejo líder, colaborador de Hitler, Stefán Bandera, y luego empezó a una política de represión, especialmente contra la población ruso-parlante del este y del sur de Ucrania, hasta que comenzó una integración con los Estados Unidos. El gobierno ucraniano hoy está recibiendo armamento de distintos países occidentales, no de toda la OTAN, pero de una buena parte de los países que la integran y eso el gobierno de la Federación Rusa, de Vladimir Putin, lo considera un riesgo para su integridad, para la paz y para su seguridad política», explicó Kreyness.

El especialista en política internacional señaló además que considera que «Ucrania es un terreno para la conflictividad entre EE.UU y la Federación Rusa, y creo que su pueblo está siendo víctima de haber impulsado, el actual gobierno, que no es de paz y de seguridad, si no de permanente provocación y dificultades»  y agregó que «es cierto que la Federación Rusa ha movilizado tropas hacía su frontera con Ucrania, pero desde el punto de vista del derecho internacional, esas tropas están en territorio ruso, en cambio, las fuerzas de algunos países de la OTAN, incluidos los EE.UU y el Reino Unido, se instalan en ucrania y tienen misiles que amenazan la seguridad de la Federación Rusa. Putin dijo ‘¿qué pensarían los norteamericanos si nosotros pudiéramos poner misiles en Canadá o en México?’. Parece tener razón porque no es explicable la presencia de tanto material bélico que está poniendo en riesgo incluso la seguridad de toda la región, si la campaña de declaraciones sigue, una guerra fría o tibia se puede ir calentando y poner al mundo al borde de una guerra. Estados Unidos trata de sostener una política exterior de gran superpotencia, cosa que se les dificulta en lo económico, y recurren el argumento militar, con un poderío que sí lo tienen, aunque acaban de perder la guerra en Siria».

La entrevista: