Casa sustentable para posgrado

El notable crecimiento del patrimonio edilicio de la Universidad Nacional de La Plata sumará en los próximos días un nuevo capítulo de la mano de la facultad de Ciencias Agrarias y Forestales. A partir de una novedosa iniciativa, y con la participación activa de la comunidad, se levantará en la sede de esa unidad académica una construcción realizada totalmente en madera, que será destinada a actividades de posgrado.

La particular propuesta se pondrá en marcha a partir del próximo martes 12, cuando comiencen las clases del curso teórico-práctico de “Construcción de vivienda canadiense de madera de alta prestación”. Se trata de una experiencia de formación académica abierta a toda la comunidad, que culminará con la autoconstrucción de una vivienda sustentable en madera, en el predio de la Facultad.

El curso es una iniciativa del Laboratorio de Investigación en Maderas (LIMAD) -perteneciente a la unidad académica-, y fue pensado con la finalidad de promover y fomentar el uso adecuado de este recurso. La experiencia cuenta con un antecedente de similares características: la construcción de un Salón de Usos Múltiples para actividades de la carrera de Ingeniería Forestal, en la estación Experimental Julio Hirschhorn, en Los Hornos.

La construcción del SUM se enmarcó en el Proyecto de Mejoramiento de la Calidad de la Enseñanza de las carreras de Ingeniería Forestal, Ingeniería en Recursos Naturales e Ingeniería Zootecnista.

Según detallaron desde Agrarias, el nuevo curso teórico-práctico contará con la participación de más 100 personas entre estudiantes, graduados y público en general, tanto del ámbito público como privado, del país y del exterior.

El proyecto surge de una iniciativa conjunta entre la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la UNLP, la Universidad Tecnológica Nacional, Regional La Plata, el INTA de Concordia y del INTI Entre Ríos.

Gabriel Keil, ingeniero forestal y director del LIMAD, remarcó que “el curso es una herramienta que apunta a difundir este sistema de construcción en la sociedad y a fomentar la creación de cooperativas de trabajo, pymes familiares o micro-emprendimientos”. En este sentido agregó que “en la actualidad, en nuestra ciudad, no existen grupos que se encarguen de este tipo de edificación a nivel habitacional”.

Keil explicó además que “desde el LIMAD existe un interés en construir viviendas para ser utilizadas por la Universidad como salones, aulas, oficinas y no como un prototipo para mostrar”. “Esta funcionalidad también nos permitirá observar cómo se comporta la madera, los recubrimientos empleados y las aislaciones térmicas y acústicas de toda la edificación”, dijo Keil.

¿En qué consiste el proceso de construcción?

Para levantar este tipo de viviendas sustentables se utiliza un sistema de paneles portantes en el que, previamente al montaje, se arman las piezas que formarán parte de las viviendas (vigas de fundación, paneles de muro ciegos y con aberturas y cabriadas, que son las estructuras que se ubican entre el techo y el cielorraso).

En la construcción en sí, durante el primer día de trabajo se fijan las vigas de fundación y el piso; el segundo día se colocan los muros perimetrales; el tercer día se instalan las cabriadas y entre el cuarto y el quinto se termina de cerrar la construcción.

Keil explicó que “todos los paneles perimetrales sostienen las cabriadas, o sea que no hay columnas. Además, como las divisiones interiores no son portantes, avanzamos con toda la construcción y al final, en base al plano, podemos modificar los interiores de acuerdo a las distintas necesidades”.

En el proceso de fabricación de las partes participan estudiantes de Ingeniería Forestal de la UNLP junto con estudiantes de la carrera de Ingeniería Civil de la UTN, Regional La Plata y jóvenes participantes de ONGs que construyen refugios para familias sin techo.

Las ventajas de las viviendas en madera

A diferencia de la construcción en húmedo, estas viviendas tienen propiedades térmicas, acústicas y hasta antisísmicas. Además pueden ser autoconstruidas por sus propios usuarios y son comparativamente más económicas.
Otra de las ventajas que ofrecen es que para su edificación se emplean muy pocas máquinas y herramientas que son de fácil manejo y más seguras.

Además, la energía para producir un metro cúbico de madera es muy inferior a la energía empleada para producir aluminio o cemento y sus paredes no se rajan ya que el material que se utiliza es más flexible.
Su construcción colabora con el uso consciente de la madera.

¿De dónde proviene la madera que se utiliza?

En el país existen 1.200.000 hectáreas de bosques implantados, que son plantaciones de pinos, eucaliptus sauces y álamos, especies introducidas que se establecen con fines de obtener materia prima para las industrias de transformación mecánica y química de la madera. En estos bosques, posterior a la cosecha vuelven a instalarse forestaciones, ya sea por plantación o por manejo del rebrote de la cepa que queda en el terreno luego de su aprovechamiento.

El director del LIMAD remarcó que para obtener la madera para construir estas viviendas no se propicia la tala de bosques nativos sino que se recurre a estos bosques implantados y manejados sosteniblemente.

En Misiones se han edificado más de 3000 viviendas y en Entre Ríos se está potenciando este tipo de construcción con un uso creciente en planes de viviendas financiados con fondos públicos. Toda esta actividad propicia el uso de madera de eucaliptus y pinos, que son maderas de especies forestales implantadas en esa región y potencian el desarrollo de los aserraderos y el aumento de mano de obra interviniente en el proceso de transformación primaria de la madera.

Por último, cabe destacar que dos prototipos de este sistema constructivo fueron aprobados por PROCREAR como alternativas a la tradicional construcción en húmedo. (Prensa UNLP)