Exportamos (a los) grasas y ¿la canasta de pobreza e indigencia?

9 mayo, 2016

Por Ernesto Mattos
Economista UBA – Docente e investigador FCEUBA-CCC-CESO

Luego de la derogación de los derechos de exportación (la soja solo se redujo un 5% en cada producto) y la reducción de las posiciones arancelarias o dicho de otra forma “se caen las DJAI”; de las existentes 19 mil posiciones arancelarias del comercio exterior que estaban vigiladas por las DJAI, se suprimieron 18 mil posiciones, o sea pasan a tener Licencias Automáticas (LAu), que permitirían un mejor desenvolvimiento del proceso de importación. Las restantes mil posiciones quedan bajo las Licencias No Automáticas (LiNAu). Esto significó una desregulación en el comercio exterior, no sólo en los derechos de exportación, sino por una mayor apertura importadora, lo que hace suponer que los niveles de reserva deberán acompañar el ritmo de importación para no tener que recurrir a una devaluación o endeudamiento para cubrir los requerimientos de producción de ciertos sectores económicos importadores. Hay que tener en cuenta que los giros de utilidades y dividendos comenzarían a pesar así como los pagos de interés de la deuda en los próximos meses y años; un dato para pintar el panorama de esta situación: salieron al exterior por Formación de Activos Externos del Sector Privado No Financiero (vulgarmente conocida como fuga de capitales, habría que redefinir esto) en el primer trimestre de 2016 u$s 3.646 millones de los cuales u$s 3.300 millones son transferencias en billetes 1 de un sistema financiero (argentino) a otro (mundo). En el mismo período el sector que mayor dinero giro al exterior por utilidades y dividendos fue Alimentos y Bebidas. En este panorama de los primeros tres meses del corriente año se hace necesario continuar observando la evolución de las variables del comercio exterior y la recaudación de los mismos.

Según informa el INDEC 2 en el primer trimestre de 2016 las exportaciones argentinas alcanzaron el valor de u$s 12.413 millones, un 2.9% superior al primer trimestre de 2015. Este incremento se explica por las cantidades ya que los precios decrecieron un -14%. Dentro las exportaciones, en el primer trimestre, los subrubros más dinámicos y que aportaron a las cantidades exportadas fueron los productos primarios, los Cereales crecieron un 90% y semillas y frutos oleaginosas un 56%. En lo que respecta a las MOA los principales subrubros que crecieron fueron Grasas y aceites un 84% y Residuos y desperdicios de la industria alimenticia un 62%; este aumento en las cantidades estuvo acompañada por un promedio a la baja de los precios de exportación del -14%, el precio del trigo y maíz disminuyeron en un -28.2% y 15.3%, respectivamente. Sin embargo, la situación del precio del producto grasas y aceites, particularmente, las harinas y pellets de la extracción del aceite de soja disminuyeron un -26.3%. Por ello las cantidades pesaron más, liquidando stock, para contrarrestar los efectos de los precios internacionales a la baja.

Por otro lado, las importaciones también tuvieron una caída del -3.4% (1°T16 vs 1°T15). Al igual que el precio de las exportaciones los precios de las importaciones fueron a la baja, amortiguados por el incremento de las cantidades en un 9.8%. Los precios bajos de los combustibles tuvieron como correlato un incremento mayor en las cantidades. El resultado de esta situación la podemos reflejar al tomar el dato del Índice de Términos del Intercambio (que relaciona la evolución diferencial de los precios de las exportaciones respecto de los de las importaciones) que para el primer trimestre de 2016, comparado contra mismo periodo de 2015, arrojo una baja del -2.2% lo que cual refleja una situación urgente a regular o tratar de revertir ante un comercio internacional con precios a la baja.

No obstante, se hace preciso tratar de sumar otros datos que tienen que ver con la recaudación impositiva por comercio exterior para observar el aporte de los derechos de exportación e importación. Los últimos datos disponibles de recaudación de la AFIP muestran que en los primero 81 días hábiles de 2016, comparado contra los 79 días hábiles de 2015, la recaudación por comercio exterior creció un 41.2%; motorizado, principalmente, por el incremento de los derechos de importación, que fue del 69.2%; mientras que la recaudación por derechos de exportación creció un 28.1%. Por lo tanto, la dinámica importadora evidencia el incremento en la recaudación por loa mayores ingresos en las cantidades.

Al derogar los derechos de exportación muchos de los productos que se volcaban al mercado interno comenzaron a ser exportables y esto se ve reflejado, primordialmente, en el incremento de los alimentos básicos que afectan a los sectores que están en la pobreza y la indigencia. Según el último informe de FIEL 3 la canasta básica alimentaria (indigencia) registro un aumento del 2.7% (abr16) e interanualmente un 35.6%; en tanto que la canasta básica total (pobreza) para el mismo periodo creció un 7.8% y un 41.5% respectivamente.

Entonces, una fuga de recursos al exterior que está siendo cubierta con endeudamiento y una recaudación, motorizado por las importaciones, que crece por debajo de los niveles de inflación y alimentos más caros en el mercado interno evidencia un cuadro critico que merece ser atendido y pensado a la luz de los aumentos recientes y de tener una política económico que asegure una estabilidad de precios para los sectores de ingresos bajos y medios.

 

1 http://www.bcra.gov.ar/Pdfs/Estadisticas/InformeITrimestre2016.pdf

2 http://www.indec.mecon.ar/uploads/informesdeprensa/ipcext_05_16.pdf

3 http://www.fiel.org/publicaciones/canasta/CAN_BAS_1462466698557.pdf

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