Resolución 125: menos trabajo, más concentración externa y pérdidas por sequía  

*Por Ernesto Mattos 
Economista (UBA) 
Investigador UBA FCE / C. C. de la Cooperación Floreal Gorini / C.E.S.O.

Se cumple una década de la famosa resolución 125 que puso sobre la mesa de los argentinos la disputa de la política económica ¿La política económica la organiza el Estado Nación o se somete al interés de un sector económico condicionando al resto de los sectores?

En la región pampeana, hay un triángulo central conformado por Rosario (Santa Fe), Pergamino (Buenos Aires) y Río Cuarto (Córdoba). Ese triángulo se asemeja al de las Bermudas, no por que desaparezcan barcos o aviones, sino porque empresas agropecuarias, una de ellas la emblemática Vassalli en Firmat (fundada en 1947) y que fabricara el primer equipo recolector de maíz del mundo, esta con dificultades económicas. Un dato, las empresas agropecuarios –netas- entre 2008 y 2017 cerraron un total de 5.951. Vassalli sobrevivió a aquella disputa denominada 125, acompaño el ritmo de producción y exportación con los obstáculos del período 2008-2018 como la sequía de 2009 y las inundaciones de 2012. Hoy se debate entre despidos y retiros voluntarios producto de la desregulación del comercio exterior iniciada en 2015. Recordemos que la sequía de 2009 tuvo el acompañamiento de la banca estatal, flexibilizando los créditos. Se había perdido un 30% de granos. En 2011 la reelección tuvo un contundente 54%. En la actualidad la sequía vuelve a golpear al sector con una pérdida estimada –u$s 6.000 millones- de los granos ¿Cómo impactará esto en la elección 2019?  

En Pergamino, al inicio  de la gestión de Cambiemos –diciembre 2015- se anunciaba la derogación de los derechos exportación al agro y la industria y que esta derogación se compensaría por el boom de exportaciones que tendría la economía, reflejada en los datos de comercio exterior de la AFIP ¿Sucedió dicho boom de recaudación post-desregulación del comercio exterior? Observemos, los derechos exportación ya no son parte importante en la recaudación anual, entre 2008 y 2015 triplicaban o cuadruplicaban año a año a los derechos importación. Entre 2016 y 2017 los derechos de exportación fueron disminuyendo en relación a los derechos de importación. Los números muestran una caída de $71.509 a $66.121 millones en derechos de exportación y un incremento de los derechos de importación de $55.305 a $69.259 millones. Durante la convertibilidad (1991-2001) los derechos importación siempre superaron a los derechos de exportación.

La liquidación de cereales y oleaginosas en 2017 fue de u$s 26.151 millones similar a la 2008 –u$s 26.056 millones-, cuando el pico de precios fue justo en 2008. Los primeros años del gobierno actual hubo una serie de devaluaciones, el tipo de cambio paso de $9 a $20. En 2017 el complejo soja exporto u$s 15.540 millones, el nivel más bajo desde el año 2009. Donde se mantiene una estructura de nueve empresas que concentran el 90% de las exportaciones principales de la Argentina, entre la que se destaca Cargill, Bunge y AGD.

No obstante, después de describir este contexto una pregunta importante es ¿Hubo generación de puestos de trabajo con el cambio de gobierno? No, los puestos de trabajo –en cultivos agrícolas- entre 2008 y 2015 pasaron de 191.332 a 190.579 y luego en 2016 había 184.923. Por lo tanto, entre 2008 y 2015 se destruyeron el 11% de los puestos de trabajo, mientras que en solo un año el 89% del total del periodo.

Entonces, sin regulación del comercio exterior peligran los puestos de trabajo y las empresas agropecuarias, en tanto que los exportadores continúan su ritmo de concentración y especulación. Sumado el peso que tiene el sector agropecuario en el crecimiento económico el desafío esta puesto en la sequía actual.